jueves, 21 de febrero de 2013

Jornada sobre depuración de aguas residuales en pequeñas poblaciones

Para conocer cómo depurar las aguas residuales de los pequeños núcleos de población, la Confederación Hidrográfica del Duero (CHDuero) organiza una JORNADA DE DEPURACIÓN DE AGUAS RESIDUALES EN PEQUEÑAS POBLACIONES en colaboración con la Junta de Castilla y León, el CEDEX (Centro de estudios y experimentación de obras públicas) y el CENTA (Fundación Centro de las nuevas tecnologías del agua).
¿CUÁNDO?
Martes 26 de febrero de 2013. De 9.30 a 14.30 h

¿DÓNDE?
En el Centro de Congresos de Valladolid, avenida Ramón Pradera, s/n

¿CÓMO?
Mediante inscripción gratuita previa hasta el viernes 22 de febrero por limitaciones de aforo de la sala

OBJETIVOS DE LA JORNADA
Entre otros:
- Facilitar información sobre las diferentes opciones técnicas no convencionales para el tratamiento de las aguas
- Suministrar aspectos normativos y organizativos en la búsqueda de soluciones sostenibles, tanto económica como ambientalmente posibles
- Presentar el Manual para la implantación de sistemas de depuración en pequeñas poblaciones

DESTINATARIOS
- Técnicos de las Administraciones Públicas (principalmente locales), ediles, técnicos municipales, agentes de desarrollo local, ...
- Personal de empresas consultoras, constructoras y otras entidades u organizaciones vinculadas y relacionada con la gestión de aguas y los ecosistemas acuáticos

Para poder asistir os proporcionamos los enlaces al formulario de inscripción así como al programa de la jornada para que tengáis más información sobre ella y que podéis encontrar también en la web de la CHDuero:
http://www.chduero.es/Inicio/Jornadasobredepuraci%C3%B3nenpeque%C3%B1a/Jornadasobredepuraci%C3%B3nenpeque%C3%B1aspoblaciones/tabid/574/Default.aspx

http://www.chduero.es/descarga.aspx?fich=/Historia/PROGRAMA-JORNADA-DEPURACION-PEQU-POBLACIONES.pdf

En línea con la jornada la CHDuero ha publicado recientemente la GUÍA PRÁCTICA PARA LA DEPURACIÓN DE AGUAS RESIDUALES EN PEQUEÑAS POBLACIONES con el fin de suministrar información, de manera sencilla, práctica y visual, sobre los sistemas de depuración aplicables a los núcleos de escasa población, que son la mayoría de los existentes en la cuenca del Duero y facilitar soluciones a los gestores municipales ante la necesidad de depurar sus aguas residuales de forma sostenible. Os damos el enlace del apartado de publicaciones de la web de la CHduero donde se puede descargar el pdf de esta publicación:
http://www.chduero.es/Inicio/Publicaciones/tabid/159/Default.aspx

Esperamos que la información de esta entrada os sea útil y os animéis a asistir a la jornada.

sábado, 2 de febrero de 2013

2 de febrero, Día mundial de los humedales: la importancia de los humedales aluviales

Hoy os traemos a nuestro blog la colaboración de Ignacio Rodríguez, técnico de la Oficina de Planificación Hidrológica de la Confederación Hidrográfica del Duero: un breve pero significativo escrito acerca de unos humedales tradicionalmente olvidados y un tanto relegados: los humedales aluviales, cuyo valor ambiental es indudable, y que la entrada de hoy pone de manifiesto.

Esta es nuestra aportación al Día mundial de los humedales, que se celebra todos los 2 de febrero en conmemoración de la firma del Convenio sobre humedales que se realizó en la ciudad iraní de Ramsar el 2 de febrero  de 1971 y que se conoce como Convenio de Ramsar, donde se iniciaron la bases para dar relevancia a estos espacios de gran diversidad ecológica sobre todo como reguladores del ciclo del agua.

LA IMPORTANCIA DE LOS HUMEDALES ALUVIALES


Ríos y humedales han sido considerados como dos entidades separadas en la gestión y en la conservación de los hábitats y de la biodiversidad, cuando la realidad física, siempre empecinada, nos dice otra cosa. La mayoría de los grandes humedales están estrechamente ligados a la dinámica fluvial, siendo resultado de inundaciones periódicas, cuyo periodo de retorno condiciona su propia existencia y, por supuesto, el tamaño del humedal.
La relación humedal-acuífero está más asimilada por la opinión pública, no así la relación río-humedal. Lo cierto es que las relaciones suelen ser más complejas y a varias bandas, ya que los humedales constituyen lo que los ecólogos denominan una interfase suelo-agua, teniendo ésta un origen diverso, ya que pueden tener alimentación de agua de lluvia, ríos, acuíferos y, en el caso de los costeros, de agua marina.
Así en España algunos de los humedales más destacados están estrechamente ligados a ríos: Doñana al Guadalquivir, las Tablas de Daimiel al Guadiana, el Delta del Ebro al Ebro…Algunos de los humedales desaparecidos para ganar terrenos agrícolas más señeros de España ocupaban zonas aluviales: La laguna de La Janda, en Cádiz, producto de la inundación de los ríos Barbate, Celemín y Almodóvar;  la laguna de Antela, en Orense, que ocupaba una zona aluvial inundable del río Limia en su confluencia con el arroyo de la Laguna de Antela… En la cuenca del Duero, los dos grandes humedales: Villafáfila y la desaparecida Nava de Campos, ocupan u ocupaban las zonas aluviales de inundación de ríos: el Salado en el primer caso, y la confluencia de los ríos (hoy canales) Valdeginate, Retortillo y arroyo del Salón, en el caso de La Nava. En Europa, con larga tradición en desecación de humedales, a fecha de hoy, en pleno apogeo de las Directivas de Hábitats, de Aves, Marco del Agua y de Inundaciones, se está hablando de canalizar para la navegación la confluencia de los ríos Danubio y Drava, que configuran un gran humedal de extraordinaria belleza e importancia: Kopacki Rit, en Croacia.
Ortoimagen de la Nava de Campos elaborada a partir de ortofotos del vuelo americano de 1956. 
A pesar de llevar tres años drenada, el contorno de la zona inundable habitual u ordinaria es perfectamente 
reconocible, como lo es también el trazado que la atraviesa del Valdeginate una vez rectificado y dragado. 

Tratamos aquí de destacar otros humedales, mucho menos conocidos y asimilados, de pequeñas dimensiones y no muy espectaculares, pero cuya suma en superficie arrojaría unas cifras que nos dejarían atónitos. Nos referimos a los pequeños anexos fluviales que en forma de canales secundarios, brazos abandonados, madres viejas, galachos, bodones, marjales, tablazos, lagunillas…, se encontraban adyacentes a tramos meandriformes y trenzados de ríos y arroyos, y que han sido barridos del mapa en procesos de colonización, concentración parcelaria, plantación de choperas, canalización y dragado.

Las zonas aluviales, en general, han sido las más ocupadas por actividades humanas, tanto agrarias como urbanas y su desaparición empieza a ser objeto de preocupación, no tanto conservacionista, sector que ha dejado un poco abandonado este “campo de batalla” quizás por el hecho de que el enemigo es tan poderoso que no merece la pena gastar cartuchos, como desde el punto de vista de la seguridad de las personas y los bienes. Y ello es así porque la disminución de las zonas inundables y su ocupación comporta cambios muy drásticos en la dinámica fluvial y en la peligrosidad de las inundaciones. El incremento de exposición al riesgo que conllevan los desarrollos urbanos y de todo tipo de actividades económicas en las zonas aluviales inundables, se multiplica por la amenaza que suponen unos caudales y velocidades mayores. La Directiva 2007/60/CE, más conocida como de inundaciones, se hace eco de este fenómeno generalizado en Europa de pérdida de la capacidad de laminación de los terrenos adyacentes a los ríos y dice, entre otras cosas, que los planes de gestión del riesgo de inundación deben centrarse en la prevención, y que con miras a dar más espacio a los ríos, se deben tomar en consideración el mantenimiento o el restablecimiento de llanuras aluviales. Todo un cambio de mentalidad que esperemos vaya calando en la sociedad y produzca una inflexión que nos lleve a recuperar parte de lo perdido.




Efectos negativos de pérdida de la morfología fluvial y de parte de la conexión hidráulica 
con los bodones adyacentes. Canalización del río Salado (Zamora) en la imagen superior, 
y transición abrupta entre un tramo no canalizado a  otro canalizado en el río Almar (Salamanca) 
en la imagen inferior.